¿Quién dijo que la cerveza era cosa del verano?

19 febrero, 2015

Ya es un hecho, la cerveza se ha pasado al invierno. Si hasta hace pocos meses se consolidaba la cerveza como la bebida del verano comienza un nuevo ciclo para esta bebida. Actualmente ya son numerosas las personas que la disfrutan también en invierno, sólo tienes que pasarte un día por las calles y descubrirlo.

La realidad ya está aquí y al igual que algo baja, también puede subir. Hay negocios que son rentables todo el año, pero hay otros que hasta la fecha sólo podían abastecerse en determinadas épocas del año. En este sentido se encuentran las cervecerías, las cuales no ampliaban sus ingresos hasta verano, quizá por el tacto refrescante que ésta aporta o la afluencia de turistas. A continuación datos del Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente.

 

 

No obstante, el pasado año 2014 fue el año de las cervecerías, recobrando cada vez cierto oxígeno hasta el punto que ya hasta en invierno la gente decide saciar el frío con una rubia, llamada así por su tonalidad amarilla. Esta situación consolida el hecho de que la cerveza se toma por iniciativa propia, sin contar con factores externos que incitan a su consumo.

Según datos de Alimarket la cervecería que más está creciendo en los últimos meses es ‘100 montaditos’, a la que le siguen muy de cerca los pubs irlandeses y el establecimiento ‘Lizarrán’, ranking en el que se encuentran socios de Fehrcarem.

El decantamiento por un establecimiento u otro depende en mayor medida del precio. Así según datos de la propia Fehr y la Asociación Española de Cerveceros más del 44% de los consumidores dejarían de disfrutar de la cerveza en el bar para hacerlo en su hogar debido a su precio.

No obstante, estamos en pleno invierno y las calles siguen abarrotadas…¿que está pasando? Para entender este boom se ha realizado una encuesta a diferentes perfiles de personas con edades y sexos diferentes, siendo los varones jóvenes los que, al parecer, más están invirtiendo en este tipo de locales.

Y es que el criterio que en mayor medida siguen los consumidores para decantarse por un establecimiento u otro es, aparte del precio, las recomendaciones, o al menos eso aseguran el 38% de los encuestados, que prefieren fiarse de su entorno frente a los anuncios que emiten los propios establecimientos, o incluso frente a la marca de la propia cerveza; que varía en función del local.

De este modo, para seguir cosechando éxitos hay que retroalimentarse. Así,  la retroalimentación de los establecimientos es también un punto a favor ya que el 28% de los encuestados tienen predilección por el diseño del local. En dicho estudio el 62 % asegura que no consumen cerveza porque fuera haga calor y les refresque sino porque les apetece, independientemente del tiempo que haga.

Sin embargo, la cerveza no está entre sus opciones prioritarias a la hora de elegir una bebida cuando están comiendo/cenando en un restaurante. De hecho se encuentra en la cuarta posición (21%), por debajo del vino (24%), el agua (31%) y el refresco (34%). Esto nos hace ver que la cerveza y su tacto refrescante y de saciedad no es lo que la gente busca al entrar a una cervecería. ¿Entonces  que buscan?

El hecho por el que la gente acude a las cervecerías es para sociabilizar, o al menos eso aseguran el 70% de los encuestados. Esto consolida el 31% de los encuestados que aseguran que acuden a las cervecerías preferentemente los fines de semana por la tarde (28%) porque es cuando disponen de más tiempo libre y hay mayor ambiente.

La tasa de consumo per cápita refleja claramente el patrón de consumo de cerveza mayoritario en nuestro país: moderado y responsable, en compañía de amigos y familiares y de un alimento. Cabe destacar la importancia del binomio entre cerveza y tapa puesto que el  81% de los españoles aseguran tomar la cerveza junto con una tapa. Esto denota que la mayoría de la sociedad opte por tomar cerveza en establecimientos hosteleros antes que en su propia casa, pese a los datos que demostraba la Fehrcarem.

 

Así, se denota que irse a tomar cañas es la excusa perfecta para salir, verse, tapear y reirse entre amigos durante un rato; como aseguran el 43% de los encuestados que asocian la cerveza con salir. Sin duda, un líquido social, natural y mediterráneo.

Con todo esto se puede decir que se aventura un año 2015 repleto de burbujas, sabores y temperaturas al son de una sociedad deseosa de sociabilizar.  Sin duda, una mezcla que las cervecerías saben muy bien aprovechar ya que saben ofrecer lo que alegra el cliente. Sí, ha llegado la hora de alzar una sonrisa de complicidad.  

¿Cervecerías frente a bares?

El crecimiento del consumo de cerveza en hostelerías frente al consumo en el hogar es un hecho. De hecho, se ha hablado continuamente de cervecerías y la eclosión que éstas suponen en la sociedad actual: diseño, sociabilización, marca de cerveza, precio… Pero estas características, ¿son sólo propias de las cervecerías?

 

 

La cerveza supone una cuarta parte de la facturación de los establecimientos hosteleros, en concreto 7.000 millones de euros en valor añadido, llegando a un 40% en el caso de los locales con menos de 10 empleados, pero la hostelería también cubre los bares.

Los bares son un recinto interesante donde también puedes encontrar estas características. Así, un trato cercano, un precio asequible o incluso un diseño estándar  son características propias de los bares.

No obstante, no es un incentivo que motive al consumidor a acudir a un bar, al menos eso aseguran la mayoría de los encuestados, que se decantan por las cervecerías por el ambiente que se respira: todos son como nosotros y todos vamos a lo mismo, charlar al son de una buena cerveza.

Un poco más sobre la cerveza:

La cerveza es una bebida fermentada de baja graduación alcohólica, de origen agrario y uso alimentario elaborada con ingredientes naturales, que está ligada a nuestra cultura mediterránea desde hace miles de años.

Dicha bebida contiene múltiples nutrientes como vitaminas del grupo B -entre las que destaca el ácido fólico y otros polifenoles con efectos antioxidantes-, minerales como potasio, magnesio, fósforo y silicio, y fibra soluble. Debe su característico sabor amargo al lúpulo, una planta de propiedades antisépticas La industria cervecera viene manteniendo un compromiso activo con la protección del medio ambiente, razón por la cual ha sido uno de los sectores pioneros en la reducción del impacto de sus envases.

Así, el porcentaje de envases recuperados, ya sea por reutilización o reciclaje, ha aumentado del 75% en 2012 al 79% en 2013. Los envases más utilizados, los de vidrio, son también los que más se recuperan, ya que se reutiliza el 20% para embotellado y se recicla el 67% de los envases no reutilizables.

La cerveza está incluida, junto con el vino, en el texto de la Dieta Mediterránea considerada Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO y en la Pirámide de la Alimentación Saludable de la SENC

Fuente: Encuesta elaborada por la Asociación de Cerveceros de España y la Federación Española de Hostelería (FEHR) a partir del estudio de PricewaterhouseCoopers ‘Informe del valor generado por la cerveza en la hostelería y el turismo’. 2013

Fuente: Encuesta elaborada por Fehrcarem. 2014